Monday, October 03, 2005

ANDORRA.

Una pequeña república en el sur de Europa, que no debe confundirse con el país de los Pirineos del mismo nombre. Andorra es una tierra de angostos valles y campos pedregosos en pendientes pronunciadas. Los cultivos tradicionales son las aceitunas y el centeno; el terreno seco no permite el trabajo mecanizado y el grano todavía se cosecha a la manera antigua, cortándolo a mano con una segadora. Andorra no es un país especialmente pintoresco, a pesar de las casas pintadas de blanco que rodean la plaza principal de la capital. Los andorranos sienten orgullo por el cristianismo tradicional de la región, y gustan de considerarse gentes piadosas. La religión está aliada muy cerca con la política; cuando la imagen de la virgen se pasea en procesión por las calles, va acompañada de soldados vestidos de verde-oliva, que marchan con bayonetas caladas. El día de San Jorge las vírgenes de Andorra están a cargo de la tarea tradicional de dar una mano de pintura blanca a toda la capital. Si bien por lo general es un país tranquilo, Andorra siempre estuvo marcada por una cierta xenofobia. Vale la pena dejar constancia que los andorranos son conocidos por haber expresado, en diversas oportunidades, fuertes sentimientos anti judíos, que ellos aplican con toda imparcialidad a judíos y no judíos por igual.
© Waldemar Verdugo Fuentes.